11.12.05

El Mundial de España

Ya estamos otra vez igual. Si cada año la Navidad nos visita de manera implacable, no menos común es la visita de la euforia desmedida, aunque esta vez es cada cuatro años. Cada vez que hay un Mundial de fútbol y juega España, algo que desde 1978 ha ocurrido siempre. Y es que no importa el grupo que nos toque o las dificultades que se hayan pasado para clasificarse: nos vemos campeones antes de jugar.

Este año lo tenemos fácil: Arabia Saudí, Ukrania y Túnez son los escollos que deberá superar en primer lugar "el equipo de todos" en su camino hacia la gloria, o lo que es más probable, hacia cuartos de final. Allí vendrá cualquier selección y nos echará a la calle, y entonces volveremos a leer y ver en todos los medios el nombre de un árbitro que será tildado de verdugo del equipo nacional y será nombrado enemigo del pueblo. Se dice que la Historia está para aprender, pero parece ser que en fútbol la historia está para repetirla hasta la saciedad. De otro modo no puedo entender cómo, durante el sorteo de los grupos, en una emisora de radio en la que suele participar un antiguo jugador del Betis, sale éste diciendo que ojalá que nos toque Holanda, que nos viene muy bien su juego. ¡¡Holanda!!

Parece que la gente tiene muy poca memoria, y no recuerda que en un grupo integrado por Serbia y Montenegro, Bosnia, Bélgica, San Marino y Lituania hemos tenido que recurrir a la repesca para poder estar en el torneo. Y no contentos con eso se permiten el lujo de desear que nos toque Holanda, una selección que, a pesar de no haber estado en el Mundial anterior, tiene mucho más fútbol que nuestro equipo y que nos puede hacer un roto muy grande. No sé qué se mete este señor, pero quiero un poco, porque se debe ver la vida mucho mejor de como es en realidad.

2 comentarios:

  1. En cierto sentido tiene razón, cuanto antes nos eliminen mejor

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  2. No, pero es que él lo decía todo convencido de que ganaríamos a Holanda. Si es que tiene que haber gente para todo.

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