5.6.06

Día de descanso


Día de descanso. 24 horas sin nada que hacer. Así definía La Pareja basura un domingo cualquiera en uno de sus desternillantes capítulos. Y así definiría yo el día de hoy, lunes, en el que por suerte o por desgracia, no me toca ir a trabajar. Ayer, aprovechando la coyuntura, salí a dar una vuelta por la noche, aunque tampoco llegara muy tarde. Total, hoy no tenía que madrugar... o eso pensaba yo.

A las ocho y media de la mañana, siete y media en Canarias, los señores de la foto se han puesto a taladrar y martillear el suelo con ese afán destructivo que les caracteriza, llenando todo el barrio con su implacable ritmo. La cosa no pasaría de ser una obra más en esta capital que tenemos en la actualidad, si no fuera porque esa misma acera la levantaron hace unos meses, y la cerraron. Parecía que había terminado nuestra pesadilla, pero hemos comprobado que eso está muy lejos de suceder. Lo gracioso de todo esto es que a las diez pararán para irse a desayunar, una vez que hayan despertado a todos los ociosos que en el barrio pueda haber hoy.

La semana pasada, en la que se repitió la historia, una amiga me preguntó: "Ah, ¿pero también tienes tú una taladradora debajo de tu casa?". La respuesta, al más puro estilo gallego, salió sola: "¿Conoces algún madrileño que no la tenga?".

8 comentarios:

  1. Por solidaridad, sólo se me ocurre decir la madre que lo parió.

    ResponderEliminar
  2. Precisamente ayer pasé por allí y la zona parece un campo de pruebas nucleares. Me pregunto dónde vive Ruiz Gallardón y si tiene una taladradora debajo de su balcón o si le han puesto un parquímetro delante de su portal.

    ResponderEliminar
  3. Creo que vive en La Moraleja. Y viaja en helicóptero.

    ResponderEliminar
  4. El señor Clos, alcalde de Barcelona, tiene también sus veleidades y caprochos, aunque sin llegar a los niveles del Ruiz-Faraón. El caso es que, entre otras cosas, le ha dado por levantar el Poblenou, calle a calle, para reconvertirlo en el 22@. Para eso, levanta calles enteras, las pica y taladra sin descanso, y finalmente las vuelve a tapar para dejarlas como estaban.

    El agravante es que sus operarios trabajan en sábado. Y además, desde tempranito. Cuántas mañanas de sábado hemos empezado a sufrir el tracatraca desde las 8 de la mañanita.

    Eso sí, una vez que te has desvelado, cagado en todo y, finalmente, resignado a levantarte y renunciar a dormir, a eso de las 9, los operarios se van a desayunar y se hace el silencio. Pero claro, uno ya no está para volver a pillar el sueño.

    Señor Clos, ¿y no podría mandar a su gente ya desayunada para que empiecen una horita más tarde?

    Y luego dicen que Cataluya es otro país. En cuanto a chapucerismo y falta de lógica y previsión, no les diferencia nada del resto del solar patrio. País, joder.

    ResponderEliminar
  5. Jeje, en eso el Lluís Recoder, munícipe por antonomasia, no la caga. El sí debe de vivir en el sitio donde hace excavar...

    ResponderEliminar
  6. Es lo que tiene el vallès su, estos pixapins.... a mi lo unico que me puede despertar es una vaca jajajajaja

    ResponderEliminar
  7. Rochem, esas no me parecen formas de llamar a tu santa esposa.

    ResponderEliminar
  8. La verdad, por donde yo vivo no hay ruídos de obras "oficiales". Todo lo más, algún aficionado al Bricomania o las perras de mi vecina a las que da por ladrar durante horas. Y horas. Justo hasta que algún vecino de viva voz se acuerda de todos sus ancestros.
    Un saludo.

    ResponderEliminar